Actualizado el viernes, 14 abril, 2023
¿Cómo te sientes tú y cómo me siento yo?
La entrevista de trabajo es el paso más importante dentro de un proceso de selección. Si has llegado hasta aquí, enhorabuena, porque solo llegan los que han suscitado ese interés en nosotros, los reclutadores.
Como sabes, puede que los nervios afloren en el peor momento, pero si estás preparado podrás sentirte seguro de ti mismo. ¿Preguntas trampa? Por supuesto que habrá, pero tú también debes tener tus propios trucos, que te los muestro más adelante.
La entrevista es un diálogo y, desde que entres por la puerta, comenzaremos a evaluarte. Estaremos atentos a los detalles: cómo te sientas en la silla o tu lenguaje verbal y corporal. Valoraciones subjetivas pero importantes, ya que también cuenta tu personalidad.
Pero todo esto no funciona si sólo una de las partes se prepara la entrevista. ¿Y cómo lo hacemos nosotros?
- Antes de nada, estudiamos la oferta y el perfil que se está buscando.
- Trabajamos con tu CV y te hacemos una primera llamada para contrastar datos y citarte para la entrevista.
- En la entrevista, preparamos dos documentos:
- CV: subrayamos los aspectos que queremos aclarar y destacamos lo que esté relacionado con el puesto para preguntar sobre ello.
- Oferta: nos centramos en las competencias o funciones a desarrollar para ver el ajuste al puesto.
- Si hay pruebas de test de personalidad o competencias, extraemos la información para preguntaros sobre algún punto que creamos relevante.
A veces se tiene una imagen negativa de los reclutadores pero algunos de nosotros intentamos reinventarnos en cada situación. ¿Y cómo? Evitando las preguntas típicas, quitando tensión en el diálogo o dando feedback sobre la entrevista. Si nos cambiásemos los papeles por un día, ¿qué opinión tendrías de nosotros? Te animo a que hagas este ejercicio y nos dejes tu opinión.
Recomendaciones para superar una entrevista de trabajo
Y ¡lo prometido es deuda!, aquí tienes mis 10 trucos para hacer una buena entrevista:
- Conoce la empresa tanto como a ti mismo.
- Viste de manera formal, es preferible pasarse de bien vestido que quedarse corto.
- Ser puntual es lo correcto, pero tampoco está bien visto que llegues tres cuartos de hora antes.
- Prepárate unas cuantas preguntas, pero sin aprenderlas de memoria.
- No relajes tu lenguaje ni te rías en exceso, puedes dar la sensación de despreocupado.
- Mira a los ojos y no intentes ser alguien que no eres, porque te pillaremos.
- Sí, te preguntaremos por tus puntos débiles, así que estate atento para darles la vuelta. “Soy exigente conmigo mismo, por lo que a veces me frustro si no llego a mi objetivo”. Ser exigente también tiene su parte buena, porque demuestra que eres trabajador y constante.
- Al finalizar la entrevista preguntaremos si tienes alguna pregunta y la respuesta siempre debe ser SÍ. ¡Pero que nunca sobre las vacaciones!
- Muéstrate tranquilo. Tienes que pensar que vas a dar lo mejor de ti y eso tiene que darte fuerza para destacar tus habilidades.
- Sé simpático, ¡con eso ganas seguro!
Y recuerda: nosotros no tenemos el poder por estar al otro lado. El poder es tuyo por todo lo que eres capaz de demostrarnos y de conseguir con tus habilidades. Confía en ti, con eso ya tienes casi todo hecho.
Pilar Ros
Técnico de RRHH