En un mundo cada vez más competitivo, es fundamental para las empresas implementar métodos que las hagan más eficientes y una de estas opciones es la metodología Agile. Si aún no sabes qué es el método Agile es el momento de averiguarlo.
Cuando se hace referencia a las metodologías Agile se habla de una serie de técnicas de gestión de proyectos destinadas a mejorar la efectividad de los mismos. Cuando se aplican estas técnicas los plazos están mejor definidos, hay mayor flexibilidad ante los imprevistos y es más fácil llegar a objetivos y medir resultados.
Los 12 principios del manifiesto Agile
Aunque el método Agile surgió en el 2001 en el ámbito del Software, estas técnicas han traspasado el ámbito IT y se han instalado en todo tipo de proyectos. Cada vez son más las empresas que adoptan los 12 principios del manifiesto Agile a la hora de trabajar. Estos principios son los siguientes:
- Satisfacción del cliente
- Adaptación al cambio
- Entregas frecuentes
- Trabajo en equipo
- Personas motivadas
- Comunicación directa
- Software funcionando
- Continuidad
- Excelencia Técnica
- Simplicidad
- Equipos Auto-organizados
- Mejora continua
El principal reto de la metodología Agile es la flexibilidad y la adaptación al cambio; aquellas organizaciones que logren ser más flexibles y adaptarse serán las que mayor provecho saquen del método Agile.
Ejemplos de métodos Agile
Como ocurre cada vez que se habla de métodos, procedimientos, técnicas, etc. es difícil hacerse una imagen mental de lo que implica esto realmente. La teoría es muy atractiva, pero ¿cómo se aplica? Hay varias formas; algunos ejemplos son:
- Listar las diferentes tareas que componen un proyecto, dividirlas en columnas según si están pendientes, en proceso, en testeo o finalizadas y comprometerse a no saturar ninguna de las columnas. Se trata de visualizar el trabajo y herramientas como Jira o Trello favorecen este método.
- Trabajar mediante ciclos cortos de trabajo o sprint y teniendo reuniones cortas de forma periódica con el equipo que se encarga de un proyecto concreto. Se trata de limitar el trabajo en progreso y es lo que se conoce como metodología SCRUM.
- Medir de forma cuantitativa y cualitativa de forma periódica para poder sacar conclusiones de cara a futuros proyectos y dirigir los esfuerzos del equipo hacia una mejora. Por supuesto, para que esto funcione es fundamental definir los objetivos. La metodología SMART work también está relacionada con estos principios.
Beneficios de la metodología Agile
- Con la metodología Agile no se diseña y planifica el producto o la tarea de forma cerrada, si no que éste va evolucionando a lo largo de todo el proyecto. Con Agile se fomenta la “cultura del error anticipado” que permite detectarlo a tiempo y contar con las medidas necesarias para rectificarlo rápido, reduciendo el riesgo significativamente.
- La metodología Agile ayuda a alcanzar los objetivos de la organización uniendo el equipo, la integración, el alto rendimiento y la reflexión. Con la Metodología Agile toda la empresa deberá entender la necesidad de cambiar las formas de trabajar. Ya no se hablará de individuos sino de equipos ya que Agile apuesta por el trabajo colaborativo para lograr un objetivo común.
- Aplicado de manera adecuada, esta metodología permite trabajar de forma mucho más organizada y esto limita presiones y favorece un mejor ambiente de trabajo.
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